Pasion

Llegas a mí y te digo muy quedito

¡Amor abrázame muy fuerte!
quiero sentir el calor de tus brazos
dándome energía…dándome dulzura,
alce mis brazos ansiosos y rodee tu cuello
y con este contacto entre tu piel…
y la mía, se encendieron mis ansias…
mis deseos… mis palpitaciones,
me tomaste del talle y me atrajiste
hacia ti haciéndome sentir que éramos
un solo cuerpo, tú en mi…yo en ti

Abre tus labios…te dije… juega con ellos,
saborea el fluido de mi humedad,
y dándole soltura a nuestro juego
que como pececitos desaforados
se bañaron en el elixir de nuestras bocas
palpándose cada vez con ritmo constante.

¡Buscas! hallaras en mi cuerpo tenso el deseo
de amarme retozándome con avidez;
y paso a paso tu lengua comienza
por mis piernas que se abren
a través de tus caricias traviesas,
continúas el camino con lujuria
me acaricias de los pies a la cabeza
regresando al panal de mis labios
y de nuevo depositas el sabor
de tus deseos en mi boca.

Bajas de nuevo buscando el calor
de mi vientre que te espera con avidez,
subes de nuevo muy despacio
castigándome de deseos,
separo las piernas para que
tu volcán llegue al sitio exacto,
me tomas mi cara con ternura
depositando tu lengua en mí grieta húmeda
haciéndome estremecer y
mi lengua ansiosa busca la tuya
y se enredan en un baile de pasión
arrancando cada gemido de tu boca…
de mi boca, haciendo vibrar todo mi cuerpo
logrando conseguir retorcerme de placer,
tus manos buscan mis senos que están
a punto de ebullición…de excitación.

Ahora soy yo la que te amarra a mi placer
haciéndote gemir una y otra vez,
subiendo mis manos sobre tu espalda
para amarte a mi manera… a mí gusto,
te hago sudar como un desaforado
hasta lograr vencerte en este juego de pasiones
y terminar en un grito de nuestras entrañas
quedándonos extenuados de placer.